Después de darle vueltas, Ana decidió ponerle a ese maravilloso espacio el nombre de Las cerillas. Y es justo cuando cae la tarde que se prenden las velas para juntarnos una vez al mes y traer fotolibros que giren alrededor de uno de los temas que proponemos. Es un taller en el que se pretende decir lo que nos gusta y lo que no de diferentes proyectos editados, mientras comemos un poco de tarta acompañada de vino, té o café.
Las personas interesadas pueden inscribirse a través del perfil en Instagram de @las_cerillas. Las plazas son limitadas y las condiciones están especificadas ahí mismo.